Como concesionario de automóviles en Victoria, una ciudad del sur de Texas de aproximadamente 68.000 habitantes, Mac Haik Ford vende más de 200 autos al mes.

Si bien el concesionario se salvó en gran parte de la furia del huracán Harvey, con daños mínimos a sus autos nuevos, sí sufrió la pérdida del suministro eléctrico después de la tormenta.

"Como todo el mundo, no teníamos electricidad", indica Greg Gunn, gerente de ventas. "No sabíamos cuándo iba a volver la electricidad.  Algunas personas estuvieron sin electricidad hasta tres semanas. Por esto, tuvimos que buscar por todos lados para encontrar una fuente de alimentación".

Un grupo electrógeno de alquiler de otra fuente dejó de funcionar, lo que obligó al concesionario a buscar de nuevo. A mediados de la semana siguiente a la tormenta, Mac Haik Ford encontró un grupo electrógeno a través de Holt Power Systems en San Antonio. Un contratista eléctrico local ayudó a conectar el grupo electrógeno al concesionario de automóviles y a restaurar la alimentación.

"Una vez que quedó instalado y funcionando, tuvimos suficiente combustible para mantenerlo en marcha de forma continua", comenta Gunn. "En ningún momento dejó de funcionar mientras lo tuvimos, siempre ofreció un buen servicio. Con ese grupo electrógeno pudimos alimentar nuestro edificio principal y dos edificios secundarios".

"Ya el jueves empezamos a vender algunos autos", comentó Gunn. "Fue muy agradable poder volver a trabajar y contar con energía, en circunstancias en que las empresas a nuestro alrededor no volvieron a contar con potencia hasta otros cuatro o cinco días después. Muchas personas necesitaban vehículos para volver a operar. Fuimos afortunados de haber podido ayudarlas".

La próxima vez que se produzca un evento meteorológico importante, Gunn indica que el concesionario de automóviles se propone estar preparado.

"Tenemos un protocolo sobre qué hacer antes de que ocurra un desastre, que consiste en proteger la tienda y adoptar ciertas medidas, como mover los vehículos", indica Gunn. "Sé que nuestra oficina corporativa está desarrollando un protocolo de electricidad para garantizar que estemos preparados, de manera que siempre que quedemos sin suministro podamos contar con un respaldo de alimentación y estemos listos para continuar funcionando. Es esencial contar con un contrato de antemano con una empresa que nos pueda proporcionar un grupo electrógeno de alquiler si se aproxima una tormenta".

"Necesitamos conseguir ese plan y establecer esa relación con Holt Power Systems, ya que a menudo olvidamos lo mucho que necesitamos la potencia".